Si hablamos de la salud de los pies de nuestros niños, hay una duda que se repite muchas veces cuando las mamás visitan nuestra tienda: cómo evitar la sudoración. Ya sea en primavera, con el aumento de temperaturas, o bien en invierno cuando toca ponerse las botas de agua, la sudoración en los pies en nuestros peques puede convertirse en un verdadero problema. Hoy os contaremos por qué se produce y cómo podemos mantener el sudor infantil a raya.
Como hemos dicho anteriormente, preocuparse por la sudoración en los pies de nuestros peques es algo muy común, de hecho, puede que alguna vez te hayas planteado si es algo normal y si esto puede afectar al niño o al bebé de alguna forma.
En bebés, la sudoración de manos y pies es algo natural, ya que hasta los 18 o 20 meses no madura su sistema de termorregulación corporal, por lo que pueden quedarse helados o sudar demasiado de un momento a otro.
“La sudoración es un proceso necesario a través del cual se libera un 95% de agua y un 5% de sustancias como el cloruro sódico».
Cuando los niños son más mayores y ya han desarrollado su sistema de termorregulación corporal, la sudoración es un mecanismo normal y necesario, entre otras cosas, para controlar la temperatura corporal, por lo que no tenéis de qué preocuparos.
Pero… ¿Qué hacer para evitar la sudoración?
Lo más importante es no sobreabrigar a nuestros niños, sobre todo a los bebés. Es aconsejable utilizar ropa de algodón, que facilita la transpiración y nos ayuda a controlar el exceso de sudoración, disminuyendo así el riesgo de patologías asociadas.
Lo mismo sucede con el calzado. Evita el uso excesivo de zapatillas o zapatos plásticos y la utilización de calzados cerrados sin calcetines. Opta siempre que puedas por el calzado de piel, ya que ayuda a mejorar la transpiración.
Además, te ofrecemos algunos consejos que ayudarán a reducir la sudoración en los pies de los niños:
- Compra calzado adecuado a la talla y edad de tu peque. Es muy importante que no comprima los dedos y sea de materiales transpirables
- No uses polvos de talco ni productos antisudorantes. Pueden provocar una masa húmeda entre los dedos y convertirse en cultivo de hongos y bacterias, además de producir dermatitis en los niños más sensibles.
- Cambia sus calcetines todos los días y si le sudan mucho los pies, puedes hacerlo incluso dos veces. ¡Recuerda usar materiales transpirables!
- No utilices todos los días los mismos zapatos, altérnalos y deja que se aireen.
- Extrae y lava las plantillas siempre que sea posible
- Opta por modelos lavables. Te será mucho más fácil mantener la higiene en sus zapatillas.
No olvides seguir también estos consejos para mantener la salud de sus piececillos en perfecto estado:
- Corta las uñas en forma recta para evitar las uñas encarnadas
- Lava sus pies a diario y seca muy bien la zona de los dedos para evitar la aparición de hongos.
- Déjale caminar descalzo siempre que sea posible
Ya sabes lo que debes hacer para mantener la sudoración a raya. A pesar de que por lo general no hay de qué preocuparse, si observas que tu peque tiene una sudoración abundante o excesiva, mal olor, o aparecen hongos en sus pies, recuerda visitar a su pediatra.